Mi nombre es Juan Rodríguez, tengo 47 años y, aunque nací en Zaragoza, considero Alcañiz como mi patria “chica”.
Mi padre, médico, era originario de Perú, conoció a mi madre, nacida en un pueblecito de Zaragoza cuando estudiaba ciencias químicas en la Universidad de Zaragoza.
Después de algunas vicisitudes y estancias en Perú, mi padre obtuvo una plaza como urólogo en el Hospital de Alcañiz.
En esta ciudad pase mi infancia y realice mis estudios primarios y de bachiller hasta que decidí seguir los pasos de mi padre por lo que me trasladé a Zaragoza para estudiar Medicina en su Facultad.
Cuando llegué al último año de carrera en Zaragoza (1992-1998), estaba claramente orientado hacia una especialidad quirúrgica. Quería seguir los pasos de mi padre y ser urólogo. Mi abuelo, también médico, ejerció de cirujano y radiólogo. La radiología para él suponía una extensión y complemento a su práctica quirúrgica. Mi padre fue el primero que me comentó a cerca de una nueva especialidad, la Radiología Intervencionista, pero no fue hasta el último año de carrera que tuve acceso a la especialidad y saltó la chispa. Mis padres siempre me empujaron a salir y descubrir lo pequeño que es el mundo; con viajes intenté conocer lugares y aprender inglés, primero en Inglaterra y después en Estados Unidos. En uno de esos viajes conocí a mi esposa en Santa Cruz, California. Volví a España ese año convencido de que quería vivir con ella y a ser posible en Santa Cruz.
A través del Profesor MA de Gregorio y su esposa conocí un poco mas la especiliadad y me dio la oportunidad de conocer a un Intervencionista americano, Dr. Horacio D’Agostino, en San Diego (California). Pequeñas cosas en la vida cambian completamente tu destino. El Dr. D’Agostino me invitó a pasar un verano como estudiante de medicina invitado en la Universidad de San Diego. En 1999, después de sacar una plaza en Radiología en Madrid, probé suerte en Estados Unidos pasando los exámenes oportunos para ello. Otra vez la fortuna me sonrió. Se quedó una plaza vacante en el programa de Radiología en Lousiana State University, Shreveport. El Dr. D’Agostino era el catedrático de Radiología desde hacía poco y confió en mi dándome la plaza vacante de residente. Hice mi internado y mi residencia en Radiología en Louisiana (2000-2005).
Para mi fellowship en Intervencionismo escogí con mi esposa la Universidad de San Francisco como mi primera opción. Queríamos volver a California y el programa era sólido. Yo siempre digo que me formé en Louisiana como intervencionista. Como persona y medico mis padres hicieron su labor principal y ejemplar hasta hoy. El año en San Francisco fue complementario a una buena base gracias a mis profesores y compañeros en Shreveport, en especial a Horacio D’Agostino y a Claudio Schönholz. Después de mi fellowship acepté una posición en Santa Cruz, California (USA) lugar al que siempre quisimos volver y formar una familia.
El principal objetivo en mi trabajo actual ha sido el desarrollo del Servicio de Intervencionismo en el Dominican Hospital. Cuando empecé en el 2006 el servicio necesitaba una modernización y expansión. Pasamos en dos años de unos 400 casos a más de 2000 al año con dos intervencionistas. Me invitaron a ser socio de mi grupo después de estar seis meses y pasé a ser jefe de servicio dos años después. Colaboración y trabajo en equipo han sido claves para el desarrollo de la especialidad en mi hospital.
El trabajo en equipo ha supuesto un claro beneficio para el paciente a la vez que el beneficio se ha hecho extensivo para la institución y para los miembros del equipo. En la actualidad en mi hospital la cartera de servicios es la de un gran hospital desde el tratamiento de AAA hasta radioembolización.
Tengo un interés especial en la enfermedad tromboembólica venosa y el papel del intervencionista en su tratamiento no solo en la sala de angiografía, si no como miembro clave en su tratamiento clínico global. Acabamos de inscribir nuestro equipo de respuesta al embolismo pulmonar al registro nacional (PERT). Todo paciente con embolia pulmonar o trombosis venosa es visto por nuestro servicio y participamos en decidir cómo tratar y seguir al paciente. Es importante estar involucrado en toda reunión, comité y consejo asesor en el hospital en el que uno trabaja. Mi filosofía es estar disponible siempre no solo a nivel asistencial si no también a nivel administrativo. Tenemos ilusión y muchos proyectos innovadores por desarrollar. La administración, lejos de poner trabas, nos anima a trabajar y desarrollar nuestra especialidad. Ofrecer tratamientos mínimamente invasivos centrados en excelencia, seguridad y atención personalizada es mi religión. Así como el continuo desarrollo y evolución constante que hace de nuestra especialidad sea más atractiva todavía hoy en día.
¿Te has sentido en alguna ocasión minusvalorado por tu condición de extrajero?
Muy raras veces he sentido una animosidad hacia mi persona por ser extranjero en la sociedad americana. Cuando llegué a Louisiana noté, al principio, una cierta reserva hacia mí, más por ser “ el enchufado” del jefe, que por extranjero. No duró mucho porque el buen trabajo y el valor añadido siempre son bien recibidos en este país. He tenido siempre muy presente que mi presencia en este país como inmigrante tenía que ser justificada con el mayor esfuerzo por mi parte en aportar valor social y asistencial. El sueño americano creo que se ejemplifica en ser reconocido y remunerado proporcionalmente al esfuerzo y talento personal.
¿Has percibido un trato discriminatorio en la selección para cargos de responsabilidad?
No he tenido problemas en ocupar posiciones de responsabilidad extra por ser extranjero en este país.
¿Qué diferencias viste en tu llegada a EEUU siendo estudiante recién acabado? ¿Había diferencias de formación con respecto a España?
La principal diferencia que noté al llegar, comparándome con estudiantes de medicina e internos americanos, fue la mayor experiencia que ellos tenían a nivel practico asistencial. A nivel de conocimientos, creo, que mi formación era muy superior a la media americana.
¿Qué recuerdos tienes de tu residencia en Shreveport?
Guardo muy buenos recuerdos de Shreveport. La camaradería y el trabajo en equipo, así como una fuente inagotable de recursos y practica asistenciales. Mi hija Gabriela nació en Shreveport, en mi último año de residencia.
¿Qué resaltarias de tu residencia americana en comparación con lo que conoces de la residencia en España?
Se ha limitado bastante la jornada laboral del residente americano actual. Cuando yo me formé, eran jornadas de 36 horas en el hospital y una noche en casa era lo normal como interno. A medida que se avanzaba en la residencia el número de guardias iba bajando. Como jefe de residentes mi último año eran cuatro dias de presencia física al mes y una semana de cada seis días de intervencionismo localizada. Ahora todo se limita a 80 horas semanales, al menos en teoría. Durante mi fellowship, el número de guardias era de una noche de cada tres para luego ser una de cada dos incluidos los fines de semana. La suerte es que conseguí un apartamento en San Francisco a una manzana del hospital. El salario medio de un residente de radiología actual en Estado Unidos es de 60.000 dólares al año. El salario medio de un fellow de intervencionismo es de 74.000 dólares al año. El salario medio de un Intervencionista en Estado Unidos hoy es de 430.000 dólares al año.
¿Qué opinan los residentes de Radiología respecto a la RI?
La mayor parte de residente de Radiología no estan interesados en el Intervencionismo. Hace unos pocos años se creó una vía alternativa de formación dedicada al intervencionista con mas años de práctica en intervencionismo y menos en diagnóstico. Creo que es la vía principal o única ahora para formarse como nuevo intervencionista.
¿Qué opinas del grado de interés que pueden tener los estudiantes de Medicina respecto al Intervencionismo?
El Interés en el intervencionismo como opción para estudiantes de medicina y residentes en radiología ha aumentado en los últimos años con la creación de un vía de formación mas dedicada al intervencionismo que consiste en tres años de formación en Radiología y tres mas en Intervencionismo y práctica clínica.
¿Cómo está la especialidad del Intervencionismo en EEUU?
En EEUU, la especialidad ocupa la quinta posición mejor remunerada con un continuo aumento en la demanda por especialistas dedicados a procedimientos mínimamente invasivos. Sigue siendo una especialidad que cubre todas las posiciones disponibles al año y de mayor competitividad.
¿Cómo pasas tu tiempo libre en EEUU?
Hace dos años compramos un velero al que dedicamos todas las semanas un tiempo en familia o por lo menos con mi esposa y amigos. Nos gusta pasar tiempo en la playa haciendo surf o paddle board así como pasar tiempo en varios de los parques naturales alrededor de la ciudad rodeado de árboles de hasta 100 metros caminando o en bicicleta de montaña.
¿Echas en falta tu país?
Siempre se echa de menos España y la familia. Trato de ir todos los años y ver a mis padres dos veces al año. Una aquí y otra allí. No hay nada como la comida hecha por tu madre y la sobremesa con la familia.
¿Qué diferencias ves entre el sistema sanitario español y americano?
El sistema español creo que es muy bueno y es comparable o mejor al americano a nivel global y de datos sanitarios de población. El sistema americano es más egoísta centrado mas en el individuo o grupo poblacional con una mayor desigualdad y, por su puesto, mucho más caro.
¿Qué diferencias ves entre el sistema de salud americano y el español?
En este mundo hay muy pocas cosas gratis. Se tiene que pagar de una forma u otra la sanidad de un país. Yo soy partidario del acceso universal a una sanidad justa y de calidad para toda la población de un pais. Al mismo tiempo se tiene que incentivar de alguna forma la calidad del trabajo ofrecido y la productividad, así como una forma de mantener y fomentar el desarrollo de la profesión, me temo que es a base de incentivos económicos. Mas del 30% de lo que yo hago al día es gratis/beneficencia o muy por debajo de la remuneración privada media. En mi caso conocer a mi esposa fue la clave para cruzar el charco aunque siempre me ha atraído el estilo de vida americano.
¿Cómo resumirías tu momento actual y tu futuro mas inmediato?
Soy muy feliz en Estado Unidos. Estoy muy agradecido a este país por acogerme y hacerme un americano más. El trabajo ocupa una gran parte de mi vida, pero me gusta lo que hago y como dije mas arriba además me pagan bien. La continua evolución de la especialidad me mantiene motivado y, con entusiasmo, adoptamos procedimientos nuevos. Trabajo con un buen grupo de médicos no solo americanos, sino de casi todo el mundo. El lugar donde vivo es perfecto. El resto del tiempo disfruto de mi familia y el medio ambiente.